El Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo
Impartido por
Objetivo: Ampliar la percepción no visual del fotógrafo, como herramienta para el enriquecimiento de su trabajo fotográfico, mediante ejercicios que estimulen su percepción corporal y sensorial.
Fechas: 12 de Noviembre – 17 de noviembre de 2007
Característica del curso: Práctico.
Dirigido a: El taller está abierto a todo aquel que cuente con una cámara fotográfica y la voluntad de engrandecer su propia visión, fuera de los clichés convencionales de la fotografía. Este taller es para Fotógrafos profesionales y personas interesadas en el medio fotográfico.
Horarios de trabajo: Lunes a Viernes en las tardes 17- 19 hrs. Y sábado11 a 2 pm
Cuota de recuperación: $1000.00 incluye uso de laboratorio, Materiales, químicos y papel fotográfico
Inscripciones e informes: Centro fotográfico Manuel Álvarez Bravo. cfab_oaxaca@yahoo.com.mx.
Requisitos: Contar con una cámara fotográfica de foco fijo y automática con rollo de 24 exposiciones blanco y negro o cámara reflex y traer el material indicado para cada sesión.
Fechas: 12 de Noviembre – 17 de noviembre de 2007
Característica del curso: Práctico.
Dirigido a: El taller está abierto a todo aquel que cuente con una cámara fotográfica y la voluntad de engrandecer su propia visión, fuera de los clichés convencionales de la fotografía. Este taller es para Fotógrafos profesionales y personas interesadas en el medio fotográfico.
Horarios de trabajo: Lunes a Viernes en las tardes 17- 19 hrs. Y sábado
Cuota de recuperación: $1000.00 incluye uso de laboratorio, Materiales, químicos y papel fotográfico
Inscripciones e informes: Centro fotográfico Manuel Álvarez Bravo. cfab_oaxaca@yahoo.com.mx.
Requisitos: Contar con una cámara fotográfica de foco fijo y automática con rollo de 24 exposiciones blanco y negro o cámara reflex y traer el material indicado para cada sesión.
Gerardo NigendaLa armonia del silencio con el movimiento del agua conduce al sociego julio 2000.
*Gerardo Nigenda se inicio como fotografo en un taller del CFMAB en 1996, Nigenda convierte las fotos impresas en descripciones literarias de las imagenes sobre el mismo soporte de las copias, resultando un fenomeno extraordinariamente interesante en términos, no solo estéticos, sino de comunicación, semióticos y artísticos, pues en ellas se conjuntan las descripciones ajenas y los recuerdos propios, la informacion gráfica y la escritura cifrada, braile.